Hoy os dejamos 5 propuestas sencillas para interactuar con la música. Están pensadas para #peques de 0 a 3 años pero seguro que lo pasaréis bien toda la #familia. . . ¿Os gustan este tipo de post? Contadnos en los comentarios cuáles son los contenidos que más os están ayudando para seguir publicando cosas que os interesen.

Danza húngara nº5, de J. Brahms

La pieza tiene cambios de tempo con los que podemos jugar a movernos más rápido o más lento. A partir de los 2 añitos, con la aparición del juego simbólico, podéis imaginar que estáis en la selva y en los pasajes rápidos os persiguen los leones. ¡Cuidado! Para los adultos también hay trampas 😉

Blue suede shoes, por E. Presley

¿Jugamos a las estatuas? Cualquier canción marchosa que invite a bailar y un mando a distancia para hacer pausas inesperadas. Un clásico que nunca falla.

Danza de las hachas, de J. Rodrigo

Esta vez pueden jugar incluso los más bebés.Sujetad juntos un palo de escoba, un aro, una cuerda… y marcad el movimiento del pulso arriba y abajo con las manos. En la frase que contrasta imaginad otro movimiento posible (a los lados o inclinarse, por ejemplo).

Entrada de gladiadores, de J. Fucik

Para marcar el pulso con algún instrumento de percusión mientras adivináis qué personajes del circo están haciendo su entrada en cada frase.

Gymnopedie nº1, de E. Satie

La banda sonora perfecta para un  viaje por el espacio o la exploración de un nuevo planeta. Moverse de forma lenta y controlada es todo un reto para los más pequeños. Para hacerlo más divertido podéis esconder por la sala “tesoros” que descubrir en ese nuevo planeta.